En el MUT de Providencia se instaló Librería Antártica provocando, por su puesta en escena, cientos de publicaciones en las redes sociales. Es todo un referente para ser visitado en Santiago.
Cuando Cristóbal Fell, arquitecto de Librería Antártica en el MUT, explica el concepto detrás de este lugar señala que representa extensión del espacio público….Pero también, se puede agregar, que es un punto replicado en el espacio virtual y lo consagra como un lugar de culto. Al visitarla es inusual la cantidad de jóvenes que ingresan y recrean con fotos o videos en la redes sociales su presencialidad.
Viene a ser un espacio como el citado por Humberto Giannini, la plaza: lugar del encuentro cotidiano, hoy sustituida por los malls y versiones como el Mercado de Tobalaba que ahora asoma como un quiasmo de lo real y zona para instagram y TikTok, como también para los adictos a los secretos códigos ocultos del Aleph o de la saga de J. K. Rowling.
El acceso a la Librería Antártica destella como un umbral que incita a ingresar por un pasillo cuyas luces perfilan su entorno, columnas revestidas de espejos verticales, vitrinas de libros, amplios decorados tipo gobelinos que recrean escenas tenues, seducen en su tránsito hacia el interior de la tienda que impacta con sus pantallas promocionales, luces escénicas, y un fondo oscuro que resalta un ambiente teatral a este habitar de los libros, recreando un lugar moderno, pero tradicional, en el que la experiencia por recorrer cada espacio se ve reforzada con anaqueles delimitados por luces que ascienden hasta dejar en evidencia las portadas estelares.
Es una librería diferente, moderna con aire de nostalgia que recuerda a otros contenedores de libros y sus vicisitudes por catalogar y acumular el tesoros de la palabra. Podría ser referencia para “El Infinito en un Junco” de Irene Vallejo… Si Alejandría fue , como biblioteca, el gran laberinto del libro, aquí a lo menos hay un teatro del libro, que invita a los nuevos habitantes de la plaza a ser parte de él. Una librería que se abre paso pese a que para muchos puede ser un acto de locura, como en la película la Librería de lsabel Coixet, pero en este caso frente a una creencia, no sustentada, de que cada vez se lee menos. Es un acto justo para reinvindicar una historia que comienza con la búsqueda del mayor tesoro y legado de la humanidad: los libros.