LA CALLE ES EN GENERAL PARA MI UN SINÓNIMO DE CULTURAS Y LAS CULTURAS NO SON ARTES PLÁSTICAS O MUSICAL EN PRIORIDAD, PERO SÍ COCINA Y/O CONVERSACIÓN
En el taller de grabados y cafetería Casaplan, Valparaíso, me encontré inesperadamente con Loro Coirón (Thierry Defert). Me acerqué a la mesa en la que se encontraba y le comenté sobre mi interés de contar con su participación en esta edición. Él amablemente accedió, me escribió en un papel estriado su email para coordinar preguntas y respuestas y, a los pocos días, llegaron las respuestas con la colaboración de Luz Méndez :
1.- ¿CUÁLES SON REFERENTES EN TU FORMACIÓN Y TÉCNICA DE REPRODUCCIÓN?
Soy de la generación del cómic o historietas de los años 60 cuando esta expresión comenzaba a renovarse. Las autoridades intelectuales de la época adscribían radicalmente a la abstracción, tanto en las escuelas como en la gran mayoría de las artes en general. La academia despreciaba esta disciplina y lo figurativo. Como pasa a menudo las generaciones jóvenes se mostraban agresivas con la precedente, representada, también, en sus profesores. Recuerdo que un día de entrega de trabajo un alumno, fantástico diseñador, presentó una propuesta figurativa con influencias de historietas. El profesor choqueado lo hizo salir de la clase, amenazándolo con expulsarlo de la escuela. En esta época, a mediados de los años 60, también los críticos terminaban sus comentarios analíticos con un fatal: “Pero es solamente una historieta”. En este contexto, nuestra generación se conmovió con una exposición en el Museo de Artes Decorativas de París, vecina del Museo de Louvre, en la que Violeta Parra exhibía sus obras. Por primera vez, nos encontramos con esta maravillosa expresión “figuración narrativa”, dos palabras que serían el motor de dos generaciones hasta el día de hoy. En las décadas de los 30, 40 y 50 existían pocos ilustradores. Pero habían casos destacables, por ejemplo, en el caso de Chile las geniales portadas de los libros de la Editorial Zig Zag. Los ilustradores de esta época tenían por apodo profesional los “pieles rojas”, porque en los periódicos populares, tal como France Soir, desarrollaban sus historietas en dos columnas paralelas, al estilo de los suplementos dominicales de la prensa americana. En una de estas columnas creaban narraciones gráficas que tenían por temas las famosas historietas de amor, love stories, que eran verdaderas teleseries en papel. En otra columna continuaba otro relato gráfico del tipo policial: “El crimen no paga”, historietas de gangsters o del tipo novela negra. Los ilustradores, en el siglo XX, eran capaces de grabar tarjetas de visitas y estampillas de algunos centímetros de tamaño. El saber es para mi el más grande patrimonio de la humanidad, después de la tolerancia. En los años 60 una obligación se perpetuaba en muros y fachadas de edificios con escritos, tales como: “Prohibido poner afiches o escribir en nombre de la ley”. Igualmente, el negro blanco estaba prohibido para imprimir afiches -estos dos colores estaban reservados a los colores de la administración-. Y también en la década de los 60, con la revuelta estudiantil, aparece la serigrafía, pero esta es otra historia .
2.- ¿ CÓMO SE GESTA EL PROCESO CREATIVO Y QUÉ TEMAS INSPIRAN TU TRABAJO, LA COMPOSICIÓN Y ESCENA?
Existen tres secretos: dibujar , dibujar y dibujar como un cocinero va a la feria en la mañana. Para mi la mañana es el secreto del espíritu sano … y de producción . Si realizas un croquis cada día lo que no es mucho, al final del año tu tienes 365 croquis, lo que no es poco y después de 10 años ¡3.650 fuentes de ilustración !.
3.- ¿DE QUÉ MANERA CREES QUE LA ILUSTRACIÓN AYUDA A “REMIRAR” LO COTIDIANO Y RESCATAR LAS PARTICULARIDADES DEL QUEHACER DE LAS PERSONAS Y SU ENTORNO, FAVORECIENDO UNA APROPIACIÓN COLECTIVA?
La ilustración es como el fútbol te permite dejar al espectador feliz o deprimido. Es la opción filosófica, ética, y realista del ilustrador frente a la sociedad. La calle es en general para mí un sinónimo de culturas y las culturas no son artes plásticas o musical en prioridad, pero si cocina y/o conversación y la manera de recibir a un visitante, o de mirarlo, es protegerlo en las calles de un barrio…Es un regalo de saber vivir, de intercambio de miradas. Las calles son una manera de vivir y regalarse en una onda que vale todas las galerías del mundo, como un restaurante o kiosko de completos , es un conjunto visual de alta sintonía si los habitantes del barrio tienen la riqueza de la hospitalidad. Esto es cultura : mirar las combinaciones de los y las otras y otros juntos.